Noviembre de 2020: era una fría tarde de invierno después de un largo día de trabajo y por fin estaba en casa, acompañado de té caliente, el fuego de la chimenea y viendo una película con mi familia. Esa noche, mi hija de 18 años, mientras veíamos una vieja película americana de los años 70, me dijo: «Papá, sabes que debió de ser muy bonito vivir en tu época, ¡me hubiera encantado nacer hace 50 años!».
Aquella frase me impactó mucho….
Fue ahí cuando me di cuenta de que algo se le estaba yendo de las manos a un boomer como yo, siendo un apasionado de la historia y la antropología me di cuenta de que el mundo corría hacia un giro negativo, si no peor, destructivo. Yo, que de la prehistoria a la Edad del Fuego y del Hierro, pasando por el Holoceno, lo sé casi todo… de hecho… ¡estoy casi convencido de haber vivido en varias épocas pasadas!
Sí, en efecto, el mundo está empeorando y la historia nos enseña que el mundo se autocorrige para salvarse, en detrimento de quienes viven en él.
El mundo no desaparecerá, pero nosotros desapareceremos si no hacemos algo significativo para salvaguardar el planeta del recalentamiento, la contaminación y la falta de agua.
¿Un ejemplo sencillo?
Chernóbil era una ciudad normal y corriente que fue abandonada en sólo dos días debido a la catástrofe que ocurrió hace sólo 40 años… Si vas a la ciudad ucraniana hoy, puedes ver cómo la naturaleza lo está recuperando todo, cómo está borrando todas las zonas abandonadas por el hombre debido a su irresponsabilidad.
El medio ambiente lo está cubriendo todo con su verde, borrándolo todo.
¿Una manifestación más reciente?
9 de marzo de 2020: toda Italia se cierra por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, los italianos no entendían lo que estaba pasando, todos se repetían: «sólo son dos semanas, luego nuestra vida volverá a su rutina habitual»…
La ciudad de Venecia se encuentra despoblada de turistas, la plaza de San Marcos está desierta, los bares cerrados, las luces apagadas, los residentes encerrados en sus casas y el turismo completamente prohibido…
Mientras tanto, ¿cuál es el estado de la laguna?
Vuelve a brillar en toda su belleza, hacía años que el agua no era tan clara y transparente: también aquí la naturaleza ha sabido protegerse, el mundo no desaparecerá, se restablecerá y volverá a empezar de cero.
Si no empezamos de verdad a respetar el medio ambiente, la naturaleza recuperará todo lo que le corresponde, pero nosotros no. Si no sabemos equilibrar el aspecto económico y el respeto a la naturaleza fracasaremos y desapareceremos, como ya ha ocurrido en épocas anteriores a la nuestra.